Steem engagement challenge-S10/W1| Creo en Dios y el poder del mal existe

Estar aquí me emociona mucho por el tema del desafío, ya que hablar de Dios me llena de felicidad y gozo.

Aprovecho la oportunidad para decirles que Dios es maravilloso y su poder es infinito. A veces algunas personas no se percatan cuando Él actúa milagrosamente en sus vidas, pero hay que saber que está en todos lados, nos escucha y acompaña siempre.

Si, tanto Dios como el poder del mal existen. Creo firmemente en Dios, ya que de lo contrario, la vida no tendría sentido alguno. Él siempre brinda protección a las personas que viven por el camino del bien y la bondad.

Personalmente, Él siempre está en mis pensamientos y he podido comprobar que existe, porque me ha permitido levantarme y seguir adelante después de momentos muy difíciles de mi vida. Sé que algunos pensarán ¿Por qué Dios nos pone esos grandes desafíos? Mi respuesta es que Él nos pone obstáculos muy díficiles para que los enfrentemos con fortaleza y fe.

En cuanto al mal, también existe y Dios quiere que lo combatas y no caigas en sus redes. El mal también está en todas partes reflejado en las malas acciones de las personas que actúan para dañar a otros. Por ello hay que seguir el camino de Dios, actuando correctamente con el prójimo para que la maldad en el mundo disminuya.

Una vez en la iglesia cuando escuchaba la misa por los difuntos, donde fue nombrado un familiar, me puse a llorar y sentía una tristeza profunda. En ese momento, una señora desconocida se me acercó, me abrazó muy fuerte y me habló con mucha dulzura. A través de ella sentí a Dios, y creo que fue enviada para consolarme, pues sentí una paz muy grande que no había sentido en meses.

Siento que Dios actúa de manera misteriosa y ese día, drené mi dolor con una completa extraña, quien me dijo palabras muy consoladoras. De ahí, fuí a abrazar a mi madre y a darle fuerza.

Yo creo firmemente en Dios y en sus promesas, así como sé que algún día todos nos volveremos a encontrar en el más allá.

El poder de Dios es extraordinario y a veces actúa de manera inexplicable. Generalmente, se hace visible mediante los milagros hacia las personas que tienen fe en Él y han entregado su corazón para servirle.

También la maldad esta presente en todos lados y ha corrompido a muchas personas. Sin embargo, el poder de Dios es mayor y ha liberado de la red maligna a mucha gente, haciendo que se arrepientan de sus malas acciones y reencuentren el camino del bien. Es decir, Dios es capaz de combatir esa maldad y cambiar absolutamente todo.