Alguna vez nos ha pasado que olvidamos algo que apreciamos y que a diario llevamos consigo tanto que nuestra mente nos traiciona con la costumbre o el hábito. A veces nos percatamos poco tiempo después y logramos recuperar ese bien rápidamente; otras veces, menos desafortunadas, no corremos con tanta suerte y perdemos aquello que tanto apreciamos.
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✅ ¿Has perdido alguna vez algo que era muy importante para ti? (Si tienes una foto del objeto, compártela con nosotros) |
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Todo iba bien, según mis planes, tomar un vuelo era algo costoso por lo que decidí iniciar mi viaje de 2 días por carretera y así ahorrar algo de dinero para mi regreso. Tenía tiempo para descansar, saludar a mi familia y llegar a la cita programada en el registro mercantil en los 3 días siguientes.
Al llegar a mi destino, me percaté que no cargaba en mi billetera mi documento de identidad, algo esencial para cualquier trámite legal. Empecé a buscar como loco en cualquier rincón de mi pantalón y equipaje, todo había sido en vano, lo había perdido.
Así imaginaba mi documento, pero lo había perdido /
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✅ ¿Qué emociones experimentó al perderlo? |
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No soy persona de alterarme por cualquier cosa, pero ésto sí que me hizo llevar mis manos a la cabeza, porque sabemos lo tortuoso que es realizar un trámite en las oficinas de identificación de mi país, y eso echaba por tierra mis planes.
Ustedes se preguntarán ¿cómo no me había dado cuenta en dos días de viaje? Simplemente como hice el viaje por carretera, no era exigible el documento y tampoco fue exigido en ninguna de las alcabalas del camino.
Entonces, pensé que a pesar de no haber perdido el documento, la suerte aún estaba de mi lado, pues había logrado llegar a mi destino sin perder tiempo.
✅ ¿Hiciste algo para encontrarlo? ¿Cuál fue el resultado? |
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Decidí calmarme y pensar repasando cada cosa que hice en los días previos y sonó una campanita en mis recuerdos que me decía donde utilicé el bendito documento. ¡Bingo! Lo utilicé en el papeleo de la promotora inmobiliaria, enseguida llamé a la persona a cargo y allí estaba mi documento.
Gracias a esa persona que conservó mi documento, me lo envió por valija y lo recibí a los dos días, justo a tiempo para continuar con el plan.
Respiré profundamente agradecido con esa persona, ya no aguantaba ese sentimiento de culpa por tan grave descuido por algo que nunca me había pasado y que no me ha vuelto a pasar desde entonces.
Logré concretar mi venta por un golpe de suerte /
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Felizmente logré concretar la venta y regresé para concretar la compra de la nueva vivienda…¡sueño cumplido para el bienestar de mi familia!
✅ ¿Qué pasos sigues para evitar perder objetos tan preciados en el futuro? |
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En esta experiencia, aprendí que debo verificar si tengo lo que necesito y donde lo encuentro antes de proceder al siguiente paso. No todos podrán tener la misma suerte que tuve yo.