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Interesante. Todos los dias me miro al espejo y conscientemente nunca me he hecho esa pregunta, aunque ahora caigo en cuenta que inconscientemente siempre lo hago. Primero antes que todo debo señalar que he tenido ciertos cambios físicos en los ultimos años y que en cierta medida han incidido en mi manera de pensar y hasta de sentir. Lo emocional está ligado a nuestro físico, y eso no es algo que yo esté inventando en este momento porque es bien sabido desde hace décadas por la ciencia médica. Este soy yo en 2017, ya habia perdido peso considerablemente y en ese momento estaria en los 115 kgs.
Hace años, no muchos, yo era obeso. En ese entonces me engañaba a mi mismo diciendome lo que los obesos siempre piensan: "Yo soy feliz asi y no tengo por qué cambiarlo". Estaba muy equivocado. Haber sido obeso me truncó muchas oportunidades en la vida pero de eso no vengo a hablarles, simplemente quiero que sepan que en ese entonces no me gustaba lo que veia cuando me miraba al espejo, solo que me hacia el desentendido. Este soy yo en Agosto 2021 después de comenzar mi nueva vida de rutinas de ejercicios y artes marciales.
Para no hacer esta historia tan larga, desde hace años he ido perdiendo gradualmente peso y medidas, y adopté un estilo de vida mas saludable incluyendo ejercicios diarios básicos, y en los ultimos meses decidí tomar entrenamiento para artes marciales, Hapkido, un arte coreano de defensa personal el cual es exigente física, mental y espiritualmente. Ahora me miro al espejo y recuerdo a aquella persona que una vez fui como algo muy lejano. Me doy cuenta del tiempo perdido al no haber asumido ésta nueva manera de pensar desde joven y apenas caigo en cuenta que pude haber sido un destacado atleta desde temprana edad. Hoy el rostro que me devuelve el espejo es mas viejo, tiene arrugas y el inclemente paso del tiempo pero... detrás de los ojos que me miran de vuelta veo esperanza, veo optimismo, veo ganas de luchar por lo que se quiere y se siente. Yo, hoy dia, después de una sesión de ejercicios y antes de ir al entrenamiento de Hapkido.
Por eso a ti que me lees te digo: nunca es tarde cuando quieres hacer algo. No pienses que estás muy viejo para hacer algo que siempre quisiste pero por las razones que sean no pudiste en su momento, no dejes que la inacción te detenga. Recuerda mis palabras cuando te digo que mas vale arrepentirse de haberlo hecho y no lograrlo, que de no haberlo intentado nunca. El cambio, si lo quieres, está a tu alcance pero tú eres quien tiene la ultima palabra de hacerlo o no.
Confía en tí, ten Fe en tí.