¡Saludos a la comunidad Scouts y sus amigos!
Desde que los medios audiovisuales existen, son la principal fuente de entretenimiento e incluso, ocio del ser humano sin embargo, esta situación se duplicó con la llegada del Internet y, las diversas plataformas digitales que han estado evolucionando.
La realidad más a fondo de esta situación es que, de manera consciente o inconsciente dedicamos horas prolongadas al contacto con una pantalla con la intención de, disfrutar nuestra programación favorita, acción que nos sumerge directamente en un estado de semiadormecimiento y, mientras los episodios de cada programación van transcurriendo, dicho estado es más profundo ocasionando así que, prácticamente caigamos en un estado de placebo audiovisual.
Al momento de darme cuenta de este estado en el que estamos, comencé a preguntarme si esta situación es normal o, se trata de un efecto negativo que está ocurriendo en nosotros y, aún no estamos siendo conscientes de esto.
Lo cierto es que, mientras unos digan que sí lo han notado o, otros afirmen que no, yo me di la tarea de analizar todas las temáticas que actualmente tienen las series de plataformas de streaming como Netflix, Amazon Prime, HBO y Hulu notando así que, la gran mayoría para no decir todas, tienen una temática escabrosa, triste, gris y dura. Ahora bien, como comunicadora social conozco perfectamente que la epopeya de un thriller es mantenernos en suspenso para que se despierte en nosotros el interés por ver la producción pero, estos creadores de contenido están utilizando dosis psicológicas adulteradas para hacernos adictos a las series.
Aunque se reconoce que dedicarle tiempo prolongado a estas producciones audiovisuales hace daño, si lo hacemos moderadamente, podemos recibir excelentes beneficios ya que, una serie de comedia tiene la facultad de contribuir en nuestro estado de animo ocasionando así que, superemos el estrés, incrementemos nuestras emociones positivas y, estemos dispuestos a ser gentiles con otras personas.
Otras series que también pueden contribuir a reconciliarnos con nosotros mismos son las de ficción o acontecimientos de la vida real porque, ellas están creadas con la intención de influir en nuestra sensibilidad y familiaridad ya que, a medida de que vamos disfrutando la producción audiovisual, nos sumergimos en una burbuja protectora donde reflexionamos o en su defecto, nos identificamos con el personaje y, a través de esta acción, creamos escenarios de solución a los posibles problemas que estamos teniendo. Sin embargo, para que esto suceda correctamente, debemos ver las producciones sin necesidad de caer en la adicción.
De acuerdo a los resultados que obtuve en un análisis situacional que hice para una asignatura de mi maestría, aprendí que, solo las series alegres y entrañables aportan beneficios a nuestro desarrollo psicológico e incluso, físico porque, las series de comedia o acontecimientos de la vida real tienen la facultad de nivelar nuestra glucosa en sangre gracias a las emociones positivas que vamos a sentir.
Sin embargo, cuando el contenido audiovisual pertenece al género de suspenso, drama o terror, las emociones que se activan son de tensión, miedo y tristezas por lo que, psicológicamente es recomendable que evitemos el exceso de estas sensaciones porque, ellas se encargan de mantenernos alterados y, esto repercute en nuestro sistema cardiovascular y neurológico. No obstante, cuando disfrutamos de las series que son del género visionario, en nuestro organismo lo que se dispara es la adrenalina, principalmente la hormona de dopamina, siendo esta la encargada del bienestar y placer.
Existen casos en los que, series de comedia, visionaria y de la vida real han ayudado a alguien al momento de superar una situación adversa, un trauma o en su defecto, le invita a buscar ayuda especializada porque reconoce que tiene un trastorno mental pero, esto solo ocurre si se realiza adecuadamente la selección.
Debido a todo esto debemos tener presente lo siguiente, no todo lo que hay en las plataformas de streaming es bueno para nuestro bienestar porque, una serie puede ocasionar que padezcamos trastornos de sueño, tengamos pesadillas o comencemos a tener insomnio y más si el espectador es un menor de edad ya que, ellos son los más vulnerables y, expuestos a estas producciones visto que, seleccionan la serie porque alguien les dijo que era interesante y si posiblemente no es supervisado, el agravante es mayor.
Para finalizar, seamos consciente en la serie que veremos y, el tiempo que le dediquemos a las mismas porque, a pesar de que parece algo sencillo y que solo es cosa de seleccionar un género, previamente debemos ver qué tan beneficioso es un contenido audiovisual específico porque, si estamos padeciendo el trastorno de depresión, no podemos seleccionar estas producciones.
De igual manera, el consumo debe ser controlado porque, pasar horas o días consecutivos frente a la pantalla, más allá de entretenernos, lo que ocasiona es que seamos personas concentradas en una sola realidad donde nos hacen vulnerables y retraídos. Sin duda, la idea es disfrutar una buena serie, no lastimarnos emocionalmente y para lograrlo, debemos seleccionar con inteligencia la producción y tiempo dedicado.
