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Cada vez que vemos una producción cinematográfica con la temática de superhéroes que tienen poderes extraordinarios, capas sorprendentes y salvan a la humanidad o el mundo de una manera fantástica, nos sorprendemos e incluso, llegamos a reír por el nivel de fantasía que tiene y, esto está bien porque, se encargan de entretenernos al igual que, aislarnos de la cotidianidad que hay en nuestra vida.
En vista de lo anteriormente mencionado, también soy partidaria de aquellas películas que estrenaron hace tiempo y contienen mensajes vitales para la sociedad convulsionada que tenemos en este momento. Debido a esto, me di la tarea de investigar y desempolvar unos excelentes clásicos del cine que se estrenaron en la época de oro del séptimo arte y, me encontré con varias producciones que nos invitan a practicar el ejercicio sanador del alma.
Durante este escudriñamiento comprendí que, en realidad existen muchas películas que se mantienen vigentes a pesar del tiempo de su estreno y, esto se debe al mensaje tan extraordinario que poseen. Una de ellas es 'El gran dictador' del entrañable Charles Chaplin. Ahora bien, en esta producción se concentran muchas catarsis de las que vivimos en la época actual y, a causa de esto considero que, todos deberíamos darnos la tarea de verla y, hacer lo posible por mantenerla en nuestro top de películas favoritas las cuales, disfrutaremos a lo largo de nuestra vida y ¿Por qué no? Difundirla de generación a generación familiar.
Actualmente estamos viviendo en una sociedad donde la intolerancia y violencia están a la orden del día y, si vemos esta película, justamente en el momento donde el barbero judío emite un discurso detonante mientras se está haciendo pasar por el temible Hynkel (Hitler), notaremos los contundentes mensajes e ideas que se terminan convirtiendo en un antídoto perfecto para hacer reflexionar y detener la agónica intolerancia y violencia que diariamente vemos en la humanidad.
En vista de que no me gusta quedarme con un conocimiento básico, quise saber por qué Chaplin incluyó este discurso en la película y para mi sorpresa me encontré que, lo hizo después de la invasión de los nazis a Francia y, llegó a sentir que ese era el momento idóneo para alzar su voz en contra del fascismo al igual que, quiso transmitir la conexión emocional que los espectadores de la guerra estaban necesitando porque, temía que los valores se llegaran a fragmentar.
Recordemos que, en 1940, La Segunda Guerra Mundial continuaba haciendo estragos en el continente europeo y, la humanidad estaba siendo testigos de como una parte importante del mundo se caía a pedazos por tal razón, el maestro Chaplin quiso hacer uso de su talento y esparcir ampliamente el clamor de aquellos que pedían el cese de esa criminalidad que se estaba llevando a cabo. Un punto clave en esta producción es que, no solo se encarga de ridiculizar y al mismo tiempo atacar de manera grotesca a aquellos que suelen aplicar la intolerancia y violencia.
El Gran Dictador también deja en evidencia que quienes ejercen estos antivalores, son débiles y no hay que tenerles miedo porque, al final del camino, esas acciones representan incluso el punto débil de quien está clamando atención u amor y por alguna circunstancia de la vida, se sienten ignorados.
Si hay un atributo que tiene el cine y lo ha sabido utilizar muy bien es, su capacidad al momento de hacer pensar a sus espectadores y todas las producciones llegan al nivel de contagiarnos con las emociones y sensaciones que emiten. Todas las películas están sistemáticamente elaboradas para transmitirnos ideas que nos ayudan a interiorizar, contienen improntas y millones de recuerdos que no olvidamos tan rápido. Sin duda, todas estas características las consagró esta producción de Charles Chaplin y, contribuyó para hacer reflexionar en cuanto al odio y violencia que se estaba llevando a cabo en esa época.
Un dato curioso de esta cinta es que, pocas personas tenían puesta su confianza en ella. Sin embargo, Hollywood tomó la decisión de darle el visto bueno luego de que Chaplin hizo reflexionar a los productores ya que, cada día que transcurría, los antivalores del odio y la violencia se sentían con más ahínco en Europa y gran parte del Occidente. Cabe destacar que, el ataque genocida hacia los judíos es considerado como la peor crueldad y acción de odio complementado con violencia que se ha visto en toda la historia de la humanidad.
Actualmente vemos como el odio y la violencia se posicionan en el corazón de la humanidad. En vista de esto considero que, si esta película se hace viral, va a volver a despertar muchas consciencias porque, las injusticias que se están cometiendo, lastiman muchos corazones y aunque parezca insólito, en el siglo XXI seguimos teniendo dictadores comandando una nación.
En conclusión, la película El Gran Dictador tiene 82 años de su estreno y en este 2023, encaja de manera perfecta por tal razón, es la referencia idónea para la consciencia que requiere nuestra humanidad y, dejemos de ser una maquinaria manipulada por cargas de resentimientos que no nos pertenecen y lo único que generan es convertirnos en agentes destructores. El llamado es para que trabajemos por un mundo mejor donde nuestra sociedad sea empática y nos respetemos entre nosotros porque, el odio y la violencia son antivalores que exterminan los sentimientos.
