¡Bendiciones!, hola querido diario se que he estado ausente, muchas cosas sucediendo pero siempre con buen ánimo y una sonrisa en mi rostro, continuamos el camino de las fisioterapias con avances y con mucho por progresar.
La celebración del día del amor venía cargada de sorpresa, sin esperar nada pero sin perder las esperanzas, feliz porque tenía a mi mamá en casa y desde el primero del mes de febrero decidí vivir los días celebrando porque pronto celebraría el primer año de mi bebé.
El día comenzó con las felicitaciones de mis amores, un miércoles para agradar a quiénes tienen la responsabilidad de educar a mis niños, por ello ya tenía organizado los detalles a entregar.
Algo que como madre quiero inculcarle a mis hijos es ser detallista, por ello mi príncipe mayor llevaba en sus manos un lindo detalle para su maestra de tercer grado, lo despedí y regrese para cuidar de su hermanito.
No había tiempo para dormir, prepare el almuerzo para el resto de la familia y Unque tenía un pequeño regalo para mi esposo preferí esperar fuera más tarde, las horas avanzaban y debía salir.
Llegamos al Centro de Desarrollo Infantil cargados de globos, aunque Ronniel no los quería entregar, luego estuvo activo en sus clases de estimulación temprana, donde trabajo la concentración y apilando objetos.
En casa estuve activa saludando por WhatsApp y relajada porque mi mamá me dijo que su regalo era un almuerzo especial, aunque con ella todos lo son.
Ronny me busco y tapo los ojos, en complicidad con su papá me tenían una sorpresa, no imaginaba que me esperaba, era un detalle con chocolates, rosas y unas hermosas argollas, que ame y de una vez colgué en mis orejas, les di las gracias por su amor y comí algunos de los dulces, pero no tardó mucho en llegar el almuerzo, que disfrute agradeciendo a Dios por su amor.
Estuve dedicada a mi familia, especialmente a mis niños que tenían la sala un poco desordenada con los juguetes, mi campeón gateaba y era dueño del espacio.
Pero como todo miércoles teníamos la cita con la fisioterapeuta, a las cinco ya nos encontrábamos en el centro de rehabilitación, entregamos los regalos a la secretaria y otras dos trabajadoras y al final a Belkys, quién con su dedicación ha logrado que Ronniel tenga avances y venza su diagnóstico.
Finalice el día con una cena para cuatro y el más pequeño disfruto de su cena saludable; un día del amor cargado de muchas bendiciones.