SEC-S16W1 | My Memorable Trip In Childhood | Mi viaje memorable en la infancia

Saben, la verdad es que de niño no viaje mucho. A duras penas mi mama y a veces mi papá nos llevaban a un parque o a la playa cuando este último se sentía generoso. Debe ser por eso que me volví muy viajero cuando logre mi independencia.

Sin embargo, recuerdo muy bien mi primer paso al senderismo. Tenia entonces 16 años recién cumplidos, estaba presentando pruebas para lo que hoy se conoce como la Universidad Militar. Las pruebas teóricas no me preocupaban, pero mis padres si estaban preocupados por mi condición física, que en ese entonces era muy importante y reprobar la prueba física era eliminatorio para el proceso.

Me puse a entrenar con un amigo y en una de esas, pensamos que para agarrar resistencia, era necesario hacer algo más que solo correr en la pista, así que le pedimos permiso a nuestros padres y en compañía de una hermana mayor de el, fuimos al entonces Parque Nacional "El Ávila", conocido como hoy como "Waraira Repano".

Las cosas eran muy diferentes en aquel entonces, dos menores de edad no podían subir sin la compañía de un adulto, de ahí a que nos acompañara su hermana. Igualmente las cosas eran muy diferentes, los caminos eran un poco más rudimentarios y descuidados y podías ver derrumbes a todo lo largo. Entramos por el guardaparque de Llano Grande en Cotiza, nuestro destino era el guardaparques "Los Venados", unos 7 kms más arriba.

Yo estaba simplemente fascinado, primera vez en mi vida que mis pulmones probaban el aire de una montaña. Recuerdo que el esfuerzo hacía que me temblaran las piernas y creo que se me bajo la presión arterial un par de veces, en caminos que hoy paso como si nada. A pesar de ello no me dejaba de encantar este espacio tan especial que primera vez en mi vida que veía tan de cerca.

Lugares emblemáticos que les he contado en mis publicaciones, como el nacimiento de la quebrada Anauco, o el mirador Anauco, no existían o no eran como son ahora, en ese entonces no subían tantas personas a la montaña, pues era un lugar de muchos mitos y leyendas a los que la gente le temía. El turismo ha modificado actualmente muchos de esos paisajes, algunos para bien otros no tanto.

Llegamos al guardaparque "Los Venados" unas tres horas después de haber iniciado el ascenso. Hoy normalmente lo hago en 45 minutos, pero me sentía como si hubiera logrado la mayor de todas las hazañas. Después la hermana de mi amigo nos guió a la caída de agua de la Zamurera, una pequeña caída de agua cristalina entre ambos puntos que por lo general esta muy fria. Fue emocionante darme un baño ahí antes de seguir mi camino.

Después de estar un rato viendo por el mirador de la Zamurera, regresamos sobre nuestros pasos de nuevo a casa. Para mi a esa edad era como si hubiese recorrido el Himalaya completo en un día, no había ni llegado a la cima pero me sentía el rey del mundo. Mis amigos ya lo habían subido anteriormente en compañía de sus padres, por eso no se les veía tan emocionados, pero me daba igual.

Después de esa vez subimos varias veces más, con el pretexto del entrenamiento. Solo llegamos a puros puntos intermedios, pero hicieron que me fuera enamorando poco a poco de conocer los senderos de la montaña. Debo decir que mi amigo y yo reprobamos el examen de admisión, el en la prueba odontológica y yo en el examen de la vista. No llegamos a presentar la prueba física.

Después de eso no subi mas hasta luego de de cumplir el servicio militar, iba ocasionalmente, luego me uní a un grupo de excursionismo para conocer aún más la montaña y luego de un tiempo comencé a hacer senderismo los fines de semana. A veces lo dejaba por compromisos y lo retomaba posteriormente, pero es un lugar al que siempre regreso y me gusta mucho hacer esa ruta en particular.