miprimerconcurso 6" entrada # 1 "Secretos de una vejez feliz"

IMG-20170813-WA0023.jpg

Hace unos días visitaba a una amiga que vive en Bachaquero, municipio Valmore Rodríguez, Venezuela. Un pueblo de explotación petrolera y producción ganadera, que en otrora fuera tierra de pescadores y de explotación maderera. Mi amiga siempre me hablaba de que todas las noches visitaba a su abuela para conversar con ella y jugar cartas. Cuando me dijo que tenía 103 años, sentí la curiosidad por conocerla, más aún al saber de su buena salud y su espítitu jovial.

Ramona Olivares nació el 24 de marzo de 1914. Hija de un pescador, tuvo una docena de hijos y tiene varias decenas de nietos y bisnietos. Ella me esperaba sentada en la entrada de su casa, rodeada de plantas y árboles. Me saludó como si me conociera de toda la vida, recibiéndome con un beso y un abrazo. De su cuerpo menudo, emanaba una fragancia de flores y frutos cítricos. Me presenté y le dije que estaba allí para hacerle algunas preguntas.

Me habló de Bachaquero cuando era un pueblo de pescadores y de cómo su esposo, un hombre nacido en Cabimas, llegó a su pueblo para pescar y construir viviendas con la madera del lugar. Yo me concentraba en sus gestos y sus manos. No dejaba de sonreír y su voz estaba llena de dulzura y espontaneidad. Antes no me podía imaginar que una persona de su edad tuviese tan buena memoria y lucidez.

Yo tenía en mente un propósito, ya que era la primera vez que hablaba con una persona tan mayor, que de ella pudiese obtener algunos consejos para llegar a vieja y estaba dispuesta a oírla, siguiendo el refrán (Quien oye consejo, llega a viejo). Después de contarme brevemente la historia de su pueblo y su familia, comencé a hacerle las preguntas.

“Señora Ramona, de sus 103 años ¿cuál fue el momento más feliz de su vida?”. Ella calló y movió la cabeza y los ojos como si en unos segundos desfilaran por su mente todos los recuerdos de su vida. “Todos. Todos los momentos de la vida son felices”. Me quedé en una pieza. Lo que me permitió obtener como primera conclusión, que la vida es bella y vale la pena vivirla. Muchas veces decimos que no siempre se puede vivir feliz todo el tiempo, que hay de vez en cuando tristezas. Ella al hablar de sus hijos me dijo que uno de ellos había muerto hace unas semanas atrás, se le quebró la voz y se le aguaron los ojos. Pero rápidamente se repuso al recuerdo y siguió narrando como levantándose de ese duelo.

La siguiente pregunta que le hice fue la siguiente: “¿Me puede dar un consejo para llegar a tener 103 años como Usted? Hizo el mismo gesto de buscar dentro de su cabeza la información requerida y rápidamente respondió: “La alimentación es muy importante. Antes comíamos pescado cuando el lago no estaba contaminado, las vacas solo comían paja y se criaban solas.

Luego me habló de personajes que conoció en estos pueblos petroleros. Específicamente, me contó de cómo conoció a Narciso Perozo, un pescador que renegaba de las empresas de explotación petrolera y que terminó siendo un trabajador de una de estas. Narciso Perozo era también un poeta popular, improvisaba coplas y décimas llenas de genialidad, ironía y jocosidad. Y Doña Ramona me recitó algunos de esos versos. Nos reímos muchísimo.

Durante nuestra charla, Doña Ramona estuvo acompañada de uno de sus dos nietos con sídrome de Down, El se presentó ante mí como “el guapo Jesús Alberto”. Es el chico que aparece en la fotografía con la Sra. Ramona. Ella hace referencia a ellos con mucho amor, al igual que con toda su familia.

De lo conversado con Doña Ramona, pude extraer estos secretos para un buen envejecer. No todos me los dijo directamente con sus palabras, sino también con sus gestos e historia de vida.

• Ser agradecido con la vida. Vivir un día a la vez. Cada momento pasado es una experiencia importante y un aprendizaje. El día de hoy es el más importante porque es una nueva oportunidad. Y si hay un mañana es porque te has hecho merecedor de este. Cada momento es de felicidad y de ti depende verlo de esa manera.
• Ser resiliente, sobreponerse ante las adversidades o cada vez que se comete un error. Y a su vez, el secreto de la resiliencia es el perdón, no sentir rencor ni rabia por alguna experiencia negativa.
• Alimentarse bien y con alimentos sanos es la mejor medicina y elixir de la juventud para nuestro cuerpo.
• Vivir con amor. El amor es el mejor alimento para el espíritu. Quien da amor siempre recibirá amor.
• Disfrutar la vida en familia. La familia es nuestra mayor aliada y con quienes compartimos la mayor parte de nuestra vida.
• Ser sociable. Una forma segura y confiable de evitar la enfermedad de Alzheimer es cultivar el valor de la amistad y ser abierto a conocer a otras personas.
• Cultivar la fe y vivir con esperanza. No se trata de esperar cosas materiales sino de desarrollar una vida espiritual plena.

No quise dar una explicación del porqué envejecemos. Solo me limité a indagar y discurrir sobre como alcanzar una edad dorada de alta calidad. Soy una mujer que unos años llegará a la de mediana edad y quiero prepararme para llegar a disfrutar de una buena vejez.

Fuente de la Fotografía: Neira urdaneta.

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
6 Comments