Tenía ganas de hacer algo diferente, de salir un poco de la parte de retratos en la calle, quería experimentar con otra cosa, hacer algo diferente en el sentido de no depender de la calle sino depender de lo que tuviera en mi alrededor, de las cosas simples que me rodean cada día usarlas para mi fotos. Dando vueltas por mi casa pensando que hacer se me ocurrió la grande idea de hacer una sesión de fotos en mi casa, todo lo que puede tener una casa, muebles, televisor, sala, adornos, mi cuarto, cocina, la verdad era algo nuevo porque me estaba obligando a jugar con el espacio y con todos los objetos que estaban a mi alrededor, jugar con los colores y sobretodo con la luz natural. Bien, ya tenía el espacio, ya más o menos tenía una temática (soy de las personas que improvisa así que eso era lo de menos jajaj), me faltaba la modelo aunque la verdad no fue difícil escogerla porque ya pensaba desde hace un tiempo trabajar con Mariangela Fattal, ella y yo nos conocimos fue por coincidencia que estábamos en la azotea de una amiga con varios fotógrafos y uno de estos fotógrafos la llevo de modelo, ese día le hice algunas fotos y creció una gran amistad desde entonces, bueno yo le escribí comentando lo que quería hacer y el cambio que buscaba ella acepto sin dudarlo.
Las primeras fotos que hicimos fueron en mi cuarto para poder aprovechar al máximo la luz que entraba en las horas de la mañana, tuve que mover mi mesa de dibujo y un baúl para aprovechar esa esquina y la pared blanca de mi cuarto que me ayudaría con la sesión de fotos, jugamos con libros, una taza de café, revistas y con la ventana. En lo personal estos retratos me enorgullecen mucho porque buscaba hacer algo diferente, lo hice y fue un tremendo éxito.
Después le dije que se cambiara de camisa y nos pusimos a pensar en que más podíamos hacer en mi cuarto, de repente ella ve mi manada de peluches y se enamora de uno, he ahí la idea, tomamos los peluches y empezamos a colocarlos en diferentes partes donde salieron estas dos fotos que me encantaron con locura.
Pasamos a la sala donde hay un enorme espejo en toda una pared y los muebles también serían protagonistas para esta sesión, y luego para finalizar quisimos aprovechar las ventanas de esta por diversión a ver que fotos podrían salir. La foto final hice un pequeño montaje que de seguro lo notaran jaja.
¿No te sientes observado?
Esto fue todo de esta sesión, cualquier opinión o comentario me lo puede dejar aquí abajo, con mucho gusto los leeré.
Lente: AF-S NIKKOR 18-55 mm f / 3.5-5.6G
ISO 200 - 400 | 18 - 55 mm | f / 3.5 - 5.6 | 1/10 - 1/300seg
Locación: Bellas Artes, Caracas, Venezuela.
Modelo: Mariangela Fattal
Edición: Lightroom y PicsArt
Foto de mi autoría
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