Imagen de Francousqui en Pixabay, editada en InShot
Me registré en Steemit hace algo más de un año. Desde que me retiré de la profesión que ejercí por más de dos décadas, estuve pensando y probando cosas qué hacer durante mi tiempo libre.
Un buen día, una amiga me contó lo que hacía para obtener ingresos extra, fuera de su trabajo formal. Me dedicó un buen rato y se fue apuradita porque tenía que publicar un post antes de cierta hora. Hoy entiendo que quizás estaba participando en una dinámica del protocolo de alguna comunidad o en un concurso por vencer.
Para ese entonces, comenzaba a caer el valor de la moneda, pero encontré en la plataforma una manera de desarrollar ideas y poner en práctica habilidades de todo tipo, principalmente de escritura.
Me tomó un tiempo empaparme de cómo funcionaba, pero en este recorrido he logrado entender muchas cosas. Entre ellas que para tener un ingreso "regular", las condiciones son constancia y apego a los lineamientos.
En mi caso se ha vuelto un hobbie, uno que acapara mucho mi atención y mi tiempo y que a largo plazo podría tener sus beneficios económicos.
He pasado temporadas en que no puedo estar muy activa. Pero hay usuarios que tienen suficientes ingresos como para disponer al menos de la mitad o la tercera parte de ellos y de esa forma solventan necesidades económicas. He visto cómo otros han logrado grandes cosas, como acceder a una vivienda para su familia o adquirir otro tipo de bienes.
Para una persona cuyos ingresos consisten en el monto de una jubilación y ayudas económicas que ofrece el Estado, y que muy esporádicamente realiza algún trabajo particular que le brinde ingresos extra, las recompensas de Steemit pueden ser una ayuda, sin embargo, aunque por lo general ando corta de dinero, por el momento, me mantengo encendiendo todas mis recompensas, considerándolas un ahorro para el futuro.
La plataforma se ha convertido en la manera de hacer lo que en la vida real me es materialmente imposible: ahorrar.
Sin embargo, evito contar con eso, ya que como sabemos es un mercado donde nada está garantizado y es mejor no contar los pollos antes de nacer. Quizás, si lograse tener recompensas más estables, comenzaría a tomar parte de ellas para solventar algunas necesidades personales, como hice en una única oportunidad.
Si la moneda tiene un descenso muy significativo en su valor, pienso que lo prudente sería mantener el acumulado y no proceder a un apagado, porque significaría perder todo el ahorro obtenido. Este es un mercado de riesgo. Desconozco si una criptomoneda puede desaparecer por completo, pero pienso que lo lógico sería apoyarla y esperar a que vuelva a ir recuperando valor.
En el caso contrario, si la moneda cobrase mayor valor, suponiendo que sea de forma abrupta, creo que sería conveniente establecer normativas para el aprovechamiento de las ganancias, ya que, sin conocer demasiado de mercados, entiendo que retirar masivamente lo que le da fortaleza al sistema, implicaría afectarlo directamente.
Si parte de mis recompensas fueran suficientes para hacer una inversión significativa en mi vida, sin duda haría uso de ellas.
En conclusión, considero que Steemit debe ser tomado como un apoyo a nuestra economía personal, sin dejar de reconocer que como actividad tiene visos de trabajo, porque requiere de un esfuerzo intelectual, dedicación en términos de tiempo y en ocasiones incluso inversiones de nuestra parte, máxime si se cumplen funciones de administrador o moderador de alguna comunidad o como representante de la plataforma.
Invito a los amigos @zory23, @zorajaime y @elider11 a participar en este reto de Cotina, reflexionando un poco acerca de nuestra visión de Steemit como actividad económica.
