Feliz y bendecido día, queridos amigos de @cotina, es un gusto saludarles y comentarles sobre mi juego de diario.
Mi día empezó a las 8am con el cantar de los pajaritos, hice mi aseo personal, preparé un desayuno que me hace recordar mi niñez, comí cornflakes con leche. Jeje Siempre ha sido mi desayuno o merienda favorita. Me tomé mis respectivas vitaminas y luego esperé un rato mientras mi mamá me confirmaba si íbamos a salir o no. La noche anterior habíamos quedado en visitar a su amigo que es como un tío para mí, ella quería llevarle un presente y yo no dudé en querer acompañarla. En ese tiempo aproveché de limpiar y acomodar la casa hasta que me dijo que saldríamos a cierta hora.
Salimos de casa a las 11am, tomamos un ruta que nos dejaría en un lugar en específico y así caminar un poco hasta la casa de nuestro amigo, el sol estaba bastante fuerte pero igual disfrutamos el trayecto. Al llegar, saludamos con cariño al amigo casi tío. Jeje Y con ello, no pude evitar disfrutar de la belleza de su casa, siempre me ha encantado por su estilo colonial y porque es muy grande. Cada vez que voy digo que quiero una casa así.
Llegó la hora del almuerzo y todos nos pusimos a ayudar a preparar la comida. Nuestro amigo preparó el pollo, mamá hizo las arepas y yo preparé la ensalada. Fue muy grato ese momento porque nos estuvo comentando un poco sobre sus vivencias de niño y sobre el carácter que tuvo su madre en vida.
De tanto conversar, se nos hicieron las 3pm y recordé que debía comprale unos medicamentos a mi mascota, que se le debe de dar cada 6 meses o anualmente, todo depende de las sugerencias o recomendaciones que nos dé el veterinario. Hice la compra y gracias a Dios ya tenía en mis manos lo que necesitaba.
Antes de retornar a casa, quise ir con mamá a un lugar donde venden unos batidos deliciosos, de verdad que aquí en Carora hace mucho calor en las tardes y nada mejor que unos batidos para refrescarnos. Ambas pedimos un batido de chocolate con Nutella, disfrutamos mucho de ese momento. Amo pasar tiempo de calidad con mi adorada madre.
Eran las 6pm y ya era hora de ir a casa. Al llegar, le di comida a mi perrita, me di un baño, preparé la cena, reposé un rato, me acosté, a los minutos me quedé dormida y así culminó mi maravilloso día.