Ok yo sé que no soy la única que ha visto su producto en polvo compacto (sea polvo de cara, sombra, broncer o iluminador) caer a su muerte, lanzarse a atraparlo, y no llegar a tiempo...y luego sollozar, mirando al cielo y gritando: 

   Mmm, ¿no? ¿Solo yo? Ok. 

   No pero en serio, todos conocen ese sentimiento de tristeza cuando un amado maquillaje en polvo se cae al piso y se quiebra. Pero..

   Agarra tu cucharilla y (sé que duele) tritura tu polvo aún más hasta que parezca polvo suelto. Trtata de hacerlo lo más fino posible. 

   Como pudieron ver, tengo un polvo y un broncer rotos. Este polvo Essence es blanco pero en realidad es traslúcido, entonces lo amo para fijar mi maquillaje (además, de verdad me deja mate, Dios sabe que mi cara asquerosamente grasosa lo necesita). El problema es que tengo también un polvo suelto Bare Minerals que jamás uso porque es demasiado oscuro para mi piel, entonces quise combinarlo con el blanco para sacarle más provecho. 

   Vierte un poco de alcohol en su tapa y luego sobre el polvo. Con la cucharilla, revuelvelo y únelo. La consistencia que quieres es una pastosa. Distribuye el producto con la cucharilla, hazlo lo más uniforme y plano que puedas. 

   No te preocupes si crees que le echaste demasiado alcohol, se va a evaporar de todos modos. Y no, cuando vayas a usar tu polvo no va a estar lleno de alcohol ahora porque, repito, SE VA A EVAPORAR.

   Ahorita tu polvo debe verse todo desigual y feo. No se va a quedar así, no te preocupes. Tenemos que sacarle todo el aire que pudo haberse quedado dentro de la mezcla, así que gentilmente levanta tu compacto 3cm y suéltalo, o dale un suave golpecito sobre la superficie en la que estás trabajando. Repite. Podrías empezar a ver cómo surgen burbujas en la superficie, esto significa que lo estás haciendo bien. Detente cuando tu mezcla se vea plana y bonita. 

   (Este paso puede salpicar y ponerse un poco desastroso, así que más te vale que hayas puesto el papel aquel que te dije).

   Coloca tu compacto sobre una superficie plana y un área fresca donde no lo vayan a mover ni arruinar. Espera aproximadamente 8hrs (yo siempre dejo el mío toda la noche por si acaso) y debería quedar así:

   Si quieres, suavemente presiona con tu pulgar para asegurar que quede bieeeeen apretado el polvo, y ¡BOOM! Ya tienes tu polvo compacto como nuevo. 

Me sorprendió bastante que este hack en serio funcionara la primera vez que lo intenté. Desde entonces, jamás he tenido que botar un polvo quebrado de nuevo. Hasta funciona con iluminadores, aunque con esos es más desastroso y tienes que realmente compactarlo duro.

   ¡Pruébalo y me dices qué tal te fue! Es demasiado fácil hacerlo.