Pensamientos de un Colombiano acerca de Venezuela

Para nadie es un secreto por lo que está atravesando el pueblo venezolano en estos momentos, el proceso para dejar sumido al país en el autoritarismo de un gobierno incompetente amenaza a los venezolanos más que nunca, desde hace más de 100 días las protestas son el común denominador en algún lugar del país contra el régimen y debido a los brotes de violencia tanto oficial como extraoficial los pasos fronterizos empiezan a ver en marcha un éxodo que tal vez pueda convertirse en una crisis humanitaria.


Fuente

Son inimaginables e incontables los pensamientos que deben pasar por aquel migrante que empieza a contemplar la opción de salir de su terruño y aventurarse a lo impredecible.

Familia, amigos, recuerdos todo lo que hay que dejar atrás por proteger la vida y la integridad, la violencia y la incertidumbre parecen llegar para quedarse en el futuro próximo.

Es difícil imaginarse lo que es vivir en una sociedad donde la represión, el abuso, la inseguridad es el pan de cada día (parece que es el único pan que se puede conseguir), y es fácil juzgar el por qué muchos venezolanos han empezado a dejar su país, pero para alguien que ha visto su vida amenazada lo último que se le puede hacer es juzgarla.

Desplazamiento


Fuente

Como testigo cercano del conflicto en mi país puedo asegurar (y creo que si se le preguntara a los venezolanos ellos responderían de la misma manera) que lo que se está viviendo es un desplazamiento y el hecho de que en Colombia haya sucedido por culpa de los grupos armados esto no quiere decir de que un gobierno totalitario como lo es el de la actual Venezuela no sea capaz de causarlo de igual manera. Si tus derechos y tú vida se ven amenazados por aquel que debería protegerlos; empaque y vámonos.

La nueva tierra


Fuente

La capital de norte de Santander es la que está acogiendo en gran medida a los hermanos venezolanos, pero esto no quiere decir que su destino final sea la ciudad de Cúcuta, algunos aún más arriesgados solo están realizando un tránsito pasajero para llegar a otras ciudades o inclusive otros países más hacia el sur del continente pero para muchos no será nada extraño que esta se convierta en su nueva tierra una vez pasadas ciertas dificultades. Los que van más allá no temen caer en la informalidad y el rebusque y para mí no ha sido extraño encontrar venezolanos en Bogotá vendiendo dulces o esferos, buscando lo del día para intentar comprar algo con que mitigar el hambre y pasar la noche.

Sentimientos encontrados


Fuente

Cada vez que puedo intento preguntarle a mis allegados que opinan de lo que está sucediendo en el vecino país y de la llegada masiva de venezolanos, las opiniones y los sentimientos están encontrados y mi análisis frente a sus respuestas me lleva a pensar que la llegada masiva de extranjeros solo servirá como un archivo expiatorio a futuro para criticar la situación del país, ya que la idea más frecuente es que a mayor cantidad de venezolanos mayor será el desempleo y la inseguridad, verdades a medias desde mi humilde punto de vista. Sería un crimen atroz el solo pensar como he escuchado a algunos de negar el paso y cerrar la frontera, pensamientos y fantasías al mejor estilo de Donald Trump y de un nacionalismo radical arcaico que solo representa la ignorancia de nuestra era.

Hermandad


Fuente

Desde que comenzó toda esta situación más allá de la frontera mis deseos solo se encaminaron a que la situación político social mejorara y que hubiera un nuevo inicio debido a los triunfos de la oposición y la fuerte resistencia del pueblo venezolano pero estos deseos se vieron atropellados por la rudeza de la realidad y los actos despóticos de un gobierno que critica al fascismo cuando ellos son los fascistas por excelencia, todo parece perdido pero el instinto de supervivencia puede más y los venezolanos no se rinden y así tengan que comenzar de nuevo en un nuevo territorio lejos de lo que alguna vez llamaron hogar desde el interior del país extiendo mi mano en bienvenida y apoyo a aquellos que huyen del terror de un estado represor, porque somos pueblos hermanos, por qué entiendo las dificultades que debe pasar aquel que deja su hogar víctima de la violencia y porque somos seres humanos por encima de todo y ojala tuviera medios materiales y físicos para atenderles de mejor manera a aquellos que llegan pero sé que este mensaje aunque pequeño y simple es mi grano de arena en ayuda de la situación que vivimos los dos países.

Fuerza y resistencia a aquellos que se quedaron y aquellos que llegan bienvenidos.


Follow @darius86

Upvote

Resteem

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
25 Comments