Nuestra vida es y será un transitar de pequeñas y grandes luchas. Desde que nacemos, luchamos para adaptarnos al mundo exterior, cambios de temperatura y en nuestra circulación es lo primero. Luego vienen esos 2 primeros años en nuestra vida donde pasamos de ser totalmente dependientes a “valernos” por nosotros mismos en las funciones vitales: caminamos y corremos, nos comunicamos, buscamos y nos llevamos la comida a la boca, desarrollamos estrategias para manipular al mundo a que nos ayude a conseguir lo que todavía no somos capaces a modus propio.
Escolaridad
Inicia uno de los aspectos más difíciles en nuestro transitar, la sociabilización, nos damos cuenta por un lado que no estamos solos, pero por el otro que tampoco somos el centro del universo. Nos toca aprender a manejar las frustraciones, además de adquirir herramientas básicas para desarrollar el conocimiento posterior.
Pubertad
Cambia nuestro cuerpo y cambia nuestra mente, aparecen otros intereses, la sexualidad, el encontrar una identidad corporal, como mostrarnos ante el mundo, el querer pertenecer a un grupo y ser aceptado.
Universidad
Escoger una carrera, las tradicionales, las emergentes, el gran dilema. Establecemos un plan de vida, surgen las incertidumbres, estaremos escogiendo la carrera o el camino correctos? Momento de diversificar nuestro conocimiento y aplicarlo al mundo actual, nos damos cuenta que un título no es suficiente, se requiere un abanico de aptitudes y habilidades, hay que encaramarse en ese tren que va a toda velocidad sino nos quedamos atrás. Pero un momento, estamos en edad de formar familia, ahora o después? Estaré eligiendo a la pareja correcta?. Tenemos pareja, y los hijos?, ahora o después?
Familia
Es el momento que ya no somos el centro de nuestra vida, empezamos a tomar decisiones en la búsqueda del bien común. Aparecen otras luchas, mantener la vida en pareja con niños en casa, ser padres, proveer necesidades, establecer disciplina.
Sociedad
Nos integramos y queremos ser factores de cambio y multiplicadores en la Sociedad. Entendemos los beneficios del bien común.
Tercera edad
Ya con el nido vacío, y quizás ya jubilados, buscamos la reinvención. En el mundo actual cada vez es más frecuente como las personas de tercera edad diversifican sus actividades para mantenerse activos y productivos.
De la actitud que tengamos en las diferentes etapas de nuestra vida va a depender nuestro bienestar. Si no tenemos problemas y dificultades, no disfrutaremos nuestros éxitos, sino sentimos tristeza, no disfrutaremos la alegría.
Ríe, canta, llora y comparte cada momento de tu vida. No dejes de esforzarte, no dejes de luchar, para que disfrutes las recompensas.
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