“El agua es la solución para mantener tu cuerpo sano”, es la frase que más escuchamos cuando de buscar un equilibrio para nuestra salud se trata.
Nuestro cuerpo, está compuesto por el 75% de agua, distribuida entre todos nuestros órganos, para su buen funcionamiento. Diariamente, perdemos una buena cantidad de líquidos por medio del sudor, la orina y en casos especiales, cuando se tiene vómitos y/o diarrea. Si no tomamos agua, nuestro cuerpo presenta síntomas propios de la deshidratación. Por ello, recomienda beber al menos, dos litros de agua diario para reponer esa pérdida.
En las calles, en nuestros trabajos, en nuestras casas y hasta nosotros mismo, podemos llegar a cometer errores por querer forzar el funcionamiento del organismo. Los errores más frecuentes se dan en personas que intentan de algún modo controlar su peso y en ocasiones, las vemos bebiendo mucha agua durante el día y tratan de aumentar la frecuencia todos los días.
¿Pero, qué pasa en nuestro cuerpo, cuando nos excedemos de la cantidad recomendada?
“Todo en exceso es malo”, también es una frase muy común y real. Si existen unas recomendaciones de cuánto debemos ingerir de agua, lo más sensato es que no abusemos con ello.
Existe una adicción compulsiva a tomar agua, ocurre principalmente en personas que padecen de algún trastorno alimenticio como la anorexia o bulimia, en el cual suplen los alimentos por el agua, con el propósito de mantener el cuerpo hidratado.
Los síntomas que llegan a manifestar, los siguientes síntomas:
-Fuertes dolores de cabeza
-Agotamiento físico
-Vómito
-Diarrea
Estas señales, son signos de que nuestro cuerpo presenta una hiperhidratación, como consecuencia del comportamiento abusivo del consumo de agua que genera la ansiedad. Cuando se convierte en una obsesión, nos encontramos con una patología psicológica llamada Potomanía o Polidipsia Psicogénica.
¿Qué es la Potomanía y cuáles son sus consecuencias?
La Potomanía se conoce por la obsesión compulsiva de consumir líquidos, principalmente agua. Las personas que lo padecen, pueden llegar a beber entre 5 hasta más litros diarios, provocando secuelas graves en el organismo.
Entre las consecuencias que deja la Potomanía, se mencionan:
-Fallas las funciones cerebrales por la disminución del magnesio, manifestándose fundamentalmente con pérdidas de la memoria y envejecimiento prematuro del cerebro.
-Infartos a causa de la disminución del potasio, ya que este mineral colabora con el buen funcionamiento de este órgano.
-Colapso renal, ya que el exceso de agua puede provocar un hiperfuncionamiento que los lleva a un daño inevitable.
-Disminución en la masa muscular derivada de la pérdida de fibra que se ve manifiesta con la presencia de fatiga.
Aunque nos suene extraño, se han dado casos aislados por intoxicación de agua o sobredosis de agua, que han tenido un final trágico.
Debemos mantener un equilibrio y ser conscientes de que no es bueno sobrecargar de ninguna manera nuestro organismo. Ya sabemos que los excesos no tienen consecuencias positivas. Podemos cuidar de nuestro cuerpo sin forzar sus funciones.
Hasta una próxima entrega.
Fuentes consultadas: 1, 2, 3, 4, 5