Las obras menores en el jardín también las hice yo solo.
Aproveché algunos materiales que habían sobrado como los azulejos sobrantes de la cocina y el gresite de una de las duchas de la planta primera.
Hice esta meseta y este armanio. La barbacoa la compré hecha, de hierro, y con ruedas para poder moverla.
Estas fueron las primeras paredes que hice yo solo con este ladrillo rústico. No coloqué regla como los albañiles, creí que al ser cosa de poco saldría bien hecha “a ojo”, pero no, hay que poner siempre una regla como guía o usar una plomada, pero lo mejor es la regla vertical de aluminio bien nivelada. Me quedaron un poquito torcidas y estaba decidido a tirarlas y reconstruirlas de nuevo, pero no, las dejé como habían quedado. El resto ya tuve algo más de cuidado.
Los tubos de agua caliente y fría y el desagüe me los había dejado instalados Andrés, el fontanero, que quizá es con el que mayor amistad conservo. Es un gran deportista, de esquí, de deportes náuticos y de moto-cros, sobre todo. Una gran persona.
El buzón para las cartas suponía un reto de precisión, no se me fueran a romper los ladrillos y preparara un desaguisado. Pero con paciencia y un cortafríos que afilé al máximo fui haciendo el hueco a medida, que había marcado previamente con el mismo buzón. Lo atornillé por dentro.
Para ese adorno de color violeta en el interior de los pilares aproveché los azulejos sobrantes de los baños, azulejos de color amarillo y violeta. Son muy fáciles de colorar, solamente con cemento cola.
La caseta de herramientas del jardín en una de las esquinas de la parcela me costó un poco más de trabajo porque ya tuve que instalar un andamio y andar con cuidado para no tropezarme:
Me ha quedado un detalle importante: la realización de las escaleras de subida del jardín a la casa y cómo tuve en cuenta salvar esa barrera arquitectónica para poder tener acceso a todo el semisótano y toda la primera planta y terrazas sin ningún escalón. Buscaré las fotos para otro post.
¿Es fácil o no es fácil? Yo sigo pensando que sí, que es muy fácil. Todo es querer y tener ganas de construir tu propia vivienda por casi la mitad de precio.