El turpial y mi verso
Ayer me puse a mirar
del turpial el lindo vuelo
y llegué a la conclusión
al unir cielo con suelo
que el turpial es parecido
en casi todo a mi verso.
Mi verso cruza el espacio
con alas de sentimiento,
se bate en un apamate,
canta de puro contento
y si llega a darle ganas
hasta se queda durmiendo.
Tiene mi verso dos alas
que van desafiando el viento
para tornar en verdad
la utopía de mi sueño
cuando en lo seco se para
y camina siempre recto
con un caballo en las patas
y unas crines en el pecho,
unos gritan que el turpial
y otros gritan que mi verso.
Cuando suena un pajarillo
su pico es un zapateo,
su copete es amarillo
y sus hombros son muy negros,
pero lo más delicioso
es que se empina de nuevo
para poblar el ambiente
con su fabuloso aspecto.
Mi verso es la Venezuela
que siente el turpial por dentro.,
es la magia de un silbido,
es nido morichalero,
es turpial, es alegría,
es grito altivo llanero
que se encuentra con las garzas
a la orilla del estero.
Es tambor que aquí yo bailo
con el gozo en movimiento
mientras que con el furor
surge mi sangre de negro
y lo bailo, sí, lo bailo
sintiendo el turpial por dentro,
igual que el verso medido
que Dios me puso en el pecho.
Por eso, no se preocupe,
no se preocupe por eso
pues vale la confusión
por hallarse todo expreso:
el turpial tien dos alas,
dos alas tien mi verso,
los dos cantan libertad,
los dos sueñan igual sueño,
el turpial cruza el espacio,
mi verso cruza los cielos,
mi verso acorta distancias,
el turpial de ellas es dueño,
mi verso puede fingir
estar dormido o despierto,
igualito que el turpial
en los copos de los cedros.....
.......de tal manera es lo mismo
¡¡¡decir turpial que mi verso!!!
Autor: Landis Rafael Álvarez Lecumberre
@lecumberre
¡Qué bonito es ser poeta en este hermoso universo
para decir todo en verso desde la a hasta la zeta!
