Cervantes Magazine Vol 27: Fotografía

Realizar fotografía en determinadas situaciones como las Procesiones de Semana Santa, resulta un ejercicio interesante, aunque se encuentren condiciones que hay que tomar muy en cuenta, ya que se producen formas de luz distintas, movimientos y sombras, además de otras situaciones que es necesario sortear y solucionar de una manera rápida y eficaz.



Una de las principales cuestiones que siempre tomo en cuenta para este tipo de situaciones es pasármelo bien, divertirme buscando lugares, al mismo tiempo que busco diferentes posiciones e imágenes que me resultan llamativas, ya sea un gesto, una actitud o un detalle puntual que se produzca. Procuro siempre pasar desapercibido, buscar mi posición sin apenas hacerme notar, vigilar mi situación para no entorpecer, interactuar con el entorno, estar siempre alerta a cada uno de mis pasos y movimientos para tomar la escena que busco.



Podría parecer un ejercicio algo difícil, ya que estas condiciones de luz, movimientos, rapidez en ejecutar las tomas, cambios de luminosidad, ajetreos de gente, imprevisto y situaciones que suceden, pueden parecer grandes obstáculos para tomar buenas fotos. En realidad, siguiendo unas pautas, todo esto es más sencillo de lo que parece en un principio.



Una de las cuestiones que tengo más en cuenta es la posición que voy a tomar, el lugar donde exactamente me parece que debo posicionarme para captar la imagen que busco. Esa es la parte más importante, ya que no solo se trata de llegar a ese punto, sino que hay un proceso de observación de la escena general; posición de la luz, posición de las imágenes y también el avance de las personas o hacia dónde se dirige lo que pretendo fotografiar.



No suelo buscar solo las imágenes de los participantes o de las figuras. Intento ir más allá, buscar entre las personas, tratar de ver algo más que la procesión, buscar emociones, gestos, alegrías o tristezas; mostrar un sentido real de esta experiencia; utilizar la creatividad y el sentimiento humano.



Procuro tener la cámara preparada para el momento en el que voy a hacer mis tomas, puesto que las condiciones cambian según sea una fotografía en la mañana, en la tarde o en la noche. También son distintas la posición y las distancias, por lo que debo ejecutar los cambios de parámetros de la cámara de una manera muy rápida. Ésta es más una cuestión de práctica y de conocer cómo funcionan nuestras cámaras fotográficas.



Espero que les haya gustado este resumen de la realización de fotografía en este breve retrato de la Semana Santa. Muchas gracias a todos.


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