“Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad.”
El día de ayer estando de guardia como cosa rara mientras estaba en mi habitación de descanso, mi compañero de guardia (mi súbdito jajaja) quien se encontraba en la emergencia me llama a mi teléfono celular, justo en el momento cuando estaba a punto de realizar mi publicación diaria en Steemit para decirme que llego un niño con el dedo pulgar dislocado, por lo cual tuve que bajar ya que no confiaba en mi compañero porque es poco experimentado y no quería que se pusiera a inventar intentando llevar ese dedo a su lugar.
Al entrar a la sala de emergencia lo primero que veo es un niño sentado en la camilla, el niño se llama Dylan tiene 3 años y estaba vestido de Spiderman, tenía una franela roja con el símbolo que lo identificaba y una capucha de ese famoso personaje, al verme no tuvo miedo de mí él sabía que yo era bueno por lo cual no dudo en mostrarme su mano lesionada, yo lo miré y no me pude contener diciendo:
- ¡Dios mío no lo puedo creer tú eres Spiderman!
Él se sonrió y movía la cabeza de arriba abajo diciendo que si, entonces me senté a su lado y le dije “necesito tomarme una foto contigo” ya que eres el primer superhéroe que me ha llegado como paciente, en eso él se me acerco y me dijo:
- Doctor mira, no puedo lanzar telaraña
- ¡Me caí cuando fui a saltar!
No salía de mi asombro en verdad, entonces observe muy bien la radiografía y evidentemente el dedo pulgar estaba dislocado, por lo cual tuve que aplicar una muy buena psicología para distraerlo “ya que es un superhéroe” y no quería que me atacara jajajaja, ¡mentira! Lo tuve que distraer para que no se pusiera a llorar, para eso le dije que me sostuviera una gasa que era de telaraña (supuestamente) él la observo y a la cuenta de tres le jale el dedito, solo se escuchó un “Click” y el dedo ya había quedado en su lugar.
Spiderman fue muy valiente y salió corriendo a abrazar a su mama, pero, aunque no lo crean no lloró, entonces se me acerco y me dijo:
- ¡Doctor eso me dolió!
Yo de verdad no podía creer lo valiente que podía ser, tenía lo esencial para ser todo un superhéroe Dylan es un niño genial, entonces entre mi compañero y yo le estabilizamos el dedito con una férula y le pusimos una venda elástica que por sus caracterizas impresionaba ser de telaraña lo cual a él le contento muchísimo, ya estando más tranquilo agarro su bolso el cual tenía una foto de “Los Vengadores” y me mostro sus personajes de superhéroes favoritos donde salían: Hulk, Iron Man, Capitán América, Thor y el increíble Spiderman, este niño me recordó mi niñez, ya que yo prácticamente cuando tenía esa edad me creía “Superman” y una vez estando en una fiesta en un hotel casi de un octavo piso salté intentando volar, gracias a dios mi madre salió a tiempo y me agarro por un pie cuando fui a saltar, esa historia se la Conte a la madre de Dylan “El Spiderman”, ella comenzó a reír y me decía:
- Doctor, usted no sabe lo que yo he vivido con este niño, en la casa tengo que estar muy pendiente de lo que hace ya que se la pasa saltando de un lugar a otro, y lo más cómico es la ropa que tiene, se viste de un superhéroe diferente cada día, pero Spiderman es el favorito de él.
Yo de verdad estaba muy contento por atender a Spiderman en el hospital, pues la manera en que ese niño disfruta su vida es inigualable, se nota el amor que le tiene su madre no se puede comparar con nada en este mundo, sin embargo, ese niño de nombre Dylan que se hace llamar Spiderman cautivo a todo el hospital.
"Ojalá y muchos niños en la actualidad mantengan esa ilusión, esas cosas son muy bonitas y la familia las disfruta con emoción, aparte de que la sonrisa de un niño que busca tu ayuda no tiene comparación."