Me dejaste en blanco.
Viniste y desordenaste mi realidad,
me dejaste en blanco.
Quitaste todas las cosas
en las que inconscientemente
sentía estabilidad
y, me dejaste en blanco.
Cambiaste mi realidad
en un instante poniendo en prueba
mi capacidad de tener paz
y me dejaste en blanco.
Se siente diferente,
para muchos inseguro;
para mi,
es seguro.
En mejores manos
no puedo estar
pues tu eres el más fuerte.
No hay otro más fuerte
porque tu que tienes
el poder para dejarme
en blanco,
y si nadie pudo,
ni puede,
ni podría en un futuro
hacer esto en mí,
nadie podrá
desestabilizarme
fuera de ti.
Tu eres mi roca,
y aunque debajo de mis pies
solo vea el vacío,
aunque mis ojos
no lo perciban,
mi suelo de cristal
esta justo ahí y me estabiliza.
Aun cuando mis ojos
perciban temor en el ambiente,
tu estas justo ahí
y me estabilizas.
Si te tengo a ti
y conozco tu naturaleza,
venga lo que venga
nunca dudaré
y nunca dejaré
de sorprenderme
por tu capacidad de
cambiar mi presente.
Hoy puede que
este todo gris en mi mundo
pero tu puedes hacer
amanecer un sol
de esperanza en medio
de un temporal y
dejarme así,
dejarnos a todos así,
en blanco.