Concurso Cervantes: 7ª Entrega

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La primera vez que vi a M'doko en el hospital casi me caía del susto. Mi corazón casi se detenía al verla desnutrida, deshidratada y con signos de malaria. Mis lágrimas estuvieron a punto de salir, delatando mi debilidad enfrente de aquellos supuestamente más débiles que yo.

En ese entonces creía en Dios. En ese entonces mi fe en esa deidad se desmoronó.

¿Por qué?, ¿por qué esas personas sufren tanto?, ¿por qué se mueren de hambre teniendo su tierra gran riqueza en comestibles? ¡Era injusto que gente tan trabajadora, tan honrada, tan honorable sufriera tanto mientras que los ricos están recostados en divanes, disfrutando de la bona vita! ¡Injusto y retorcido!

En ese momento quise gritar, quise desmoronarme frente a aquella mujer de mirada dulce que no tenía culpa de nada en este castigo de Dios... O del hombre... No sé.

Sin embargo, heme ahí, con la sonrisa más falsa que pudiera haber elegido, hablándole con dulzura. Heme ahí que ella, con esa voz apagada, casi muda, me dice que se siente mal, que tiene fiebre. Heme ahí que, a pesar de sentirme impotente, la ayuda a incorporarse para hacer las revisiones pertinentes y determinar si requería hospitalización o reposo absoluto en casa.  Aguantándome las lágrimas, no como un "macho" como dicen en mi país.... Sino como alguien que acaba de sentir cómo le quitaban un velo de los ojos y que termina por conocer la aplastante realidad de su alrededor. Alguien que se da cuenta que Dios no existe y que somos nosotros, los seres humanos, quienes forjamos nuestro destino.

Apenas terminé de atenderla, le dije a mi compañero Jacques que saldría  a tomar un poco de aire fresco por unos cinco minutos. Éste asintió la cabeza, quizás con comprensión o quizás porque sabía que he de volver pronto a cumplir mi deber como médico. Una vez afuera, procuré apartarme del improvisado hospital que se levantó en medio de la selva; procuré posicionarme en un lugar en donde nadie me viese ni me oyese.

Y ahí, apoyando mi cabeza contra la corteza de un árbol y en medio del silencio, grité de dolor. 

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Concurso patrocinado por el witness @cervantes. No te olvides de votarlo en la siguiente página: http://www.steemit.com/~witnesses

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GIF creado por @fabiyamada


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