Un lugar lleno de muchos contrastes, la riqueza visual de sus paisajes te enamoran, te llenan de vida, te recargas de tanto azul en el horizonte, eso es Manicuare.
Pero también es un pueblo por el cual caminas y pareciera se ha detenido el tiempo, el ritmo de sus habitantes transita en un día a día, concentrados en la faena pesquera que es la principal fuente de ingreso de sus habitantes.
Es el lugar que inspiró al poeta con su azul y no hay duda que te impregnas de el cuando estás allí, te pierdes en la inmensidad de sus parajes áridos, en los rostro curiosos de sus niños, en la sabiduría de sus ancianos, su calle principal al recorrerla sientes, es un mundo distinto del que vienes, allí todo es diferente, es un pueblo que se mantiene del azul, así lo veo yo.
Es una comunidad que vive muchas necesidades por lo lejano que tienen todo, porque para llegar a el desde la capital del estado, Cumaná, debes hacer una travesía de aproximadamente 15 min en una embarcación tipo bote que le llaman "Tapaito", es un bote de pescador modificado, tapado ajustado para el traslado de pasajeros.
Es un pueblo noble que aún conserva su ingenuidad propia de estos parajes apartados de las grandes ciudades pero con circunstancias en ocasiones bastantes hostiles.
Todas las fotografías son de mi autoría, realizadas por una Canon rebel T3
Los leo en los comentarios @zailecita