En arte me convertí
Quería experimentar el arte
así que poco a poco en él me convertía.
Pintaba mis deseos cada tarde
y de color llené lo que sentía.
——————
Al final del día,
el lienzo terminaba,
tan o menos pintado,
de lo que yo lo estaba.
——————
No importaba el color del día
o si mi estado de ánimo caía
representando tristezas.
No importaban los tiempos,
sentir los colores entre mis dedos
me brindaba una enorme alegría.
——————
Alegría que fui canalizando
incluso los días de azul más intenso.
Sonreía tras ver mi crecimiento
y las pinceladas lanzadas al aire
que terminaban con mi sonrisa más sincera
convirtiéndose junto al lienzo en el más puro arte.
——————
En arte me convertí,
finalmente,
aquel día que te fuiste
y entre lágrimas pintadas
dibujé mis raíces
hechas colores.
En cada color derretido
yacían todas las ilusiones
que con tu partida dejaste,
ilusiones que compartíamos
y ahora sólo quedaron
para mí, mis colores y su arte.
No coloqué la fuente de las otras tres imágenes porque fueron tomadas por mí, incluso el lienzo fue hecho por mí. Antiguas etapas de matar el tiempo quemando crayones de cera.